Presentaciones

Ejemplo de presentación

Hay muchos tipos de presentaciones («powerpoints», vamos). El más «conocido» es el que se usa en una charla o conferencia ante una audiencia de más de 10 o 15 personas. Otro es la típica de un seminario con un reducido número de participantes. Un tercer tipo es aquella diseñada para ser vista sin presentador, esto es, sin banda sonora. Todo lo que se quiera «decir» debe estar en las diapositivas. Esa es la razón por la que algunas presentaciones de SlideShare «funcionan» (las diseñadas así) y otras no (las que necesitan la «banda sonora» del presentador/a). Esa es la razón por la que no subo presentaciones a SlideShare: mis presentaciones no han sido diseñadas para ser «vistas» mudas. Les faltaría la banda sonora. Prefiero publicar vídeos, sobre todo si están adecuadamente montados y se ve la presentación cuando toca y el durante el tiempo que toca (el suficiente para verla, pero no más). Es más, recordemos que NOSOTROS somos (gran parte de) la presentración :-).

Garr Reynolds (Presentation Zen) es uno de mis gurús en materia de presentaciones (y de medio mundo). En la presentación que incrusto a continuación, de SlideShare y sin audio, usa un recurso fantásticamente efectivo: un personaje de cómic, él mismo, para «hilar» el discurso. Además presenta un libro que usa el lenguaje manga para presentar sus ideas. Puestos a pedir, quizá yo le hubiera dado un «look» manga al personaje de Garr en lugar de usar línea clara :-).

De cualquier modo, lo traigo aquí como un ejemplo excelente de cómo diseñar una presentación sin un presentador que proporcione el mensaje oralmente, pero con un presentador dibujado superpuesto que explica y comenta las diapositivas, incluyendo toques de humor de un alter ego más cool («¿minigarr?» :-)) que aparece de cuando en cuando. Sin discurso oral las cosas se alargan: 184 diapositivas. Si el lector se cansa, pues con ver cómo «funciona» el formato, vale. El libro que presenta, bueno… que cada uno/a juzgue. No es la razón por la que lo traigo aquí, precisamente. La autoayuda no es mi género favorito, aunque mi amigo Toni Bellver siempre dice que, en las librerías, los libros sobre presentaciones deberían estar en la estantería de la autoayuda y no en informática. No le falta algo de razón.

Pero ya vale. Veamos la presentación y al dibujo de Garr Reynolds explicándonos con pequeños textos por qué deberíamos comparar el libro de su amiguete.

Presentaciones

SlideShare destierra las viñetas («bullet points») de las presentaciones

Todos sufrimos en silencio las malas presentaciones. Gente brillante y bienintencionada perpetra conferencias, clases, información de productos y proyectos, defensas de tesis doctorales y de proyectos docentes, etc. acompañadas de presentaciones («powerpoints») multimedia (es un decir) terroríficas. Las razones son diversas.

La más evidente es confundir la presentación con los apuntes de los alumnos, con la documentación a distribuir entre los asistentes, con las notas del orador o con una mezcla de todo ello. No son ninguna de esas cosas. La presentación es lo que el orador quiere que la audiencia «vea» mientras le escucha. En una presentación, el canal auditivo está ocupado procesando el mensaje oral, el canal visual está ocupado preocesando el mensaje visual. Una parte es la presentación, otra el propio presentador. La información que circula por ambos canales, visual y auditivo, debe coordinarse y complementarse, no interferirse. Y hay que tener en cuenta que la capacidad de procesamiento de información de los seres humanos es limitada y, por tanto, seleccionamos ciertos estímulos y «dejamos pasar» otros en función de diversos factores, algunos son propios del mensaje (y controlables por el presentador), otros son personales, como los conocimientos previos (familiaridad con las ideas y conceptos expresados), las actitudes (sintonía con las del orador) y las expectativas generadas por el orador o el presentador (otro día hablaremos de presentaciones asesinas del moderador, coordinador, etc.) son especialmente importantes.
En fin, que muchas presentaciones (o «powerpoints» como las llama todo el mundo) son sencillamente horribles. Nadie nos ha enseñado a hacerlas, copiamos lo que vemos y lo que vemos es lo que «invita a hacer» el PowerPoint (el programa).

SlideShare, quizá el sitio web más conocido de la red para compartir presentaciones, ha decidido contribuir a mejorar el mundo fichando a Edward Tufte para su consejo asesor. Tufte es una renombrada autoridad en la representación gráfica de datos numéricos (i.e., “The Visual Display of Quantitative Information») y el autor de un folleto muy difundido titulado «The Cognitive Style of PowerPoint” en el que analiza como dicha aplicación «impone» su estilo cognitivo a quien la usa, con efectos devastadores para la audiencia (véase su artículo «PowerPoint Is Evil. Power Corrupts. PowerPoint Corrupts Absolutely», un resumen del citado libro).

La primera medida en la que se nota «la mano» de Tufte en SlideShare es la decisión de poner en marcha un algoritmo que detecta e impide «subir» presentaciones con «bullets» y otros elementos igualmente negativos:

Welcoming Tufte to the board, Jonathan Boutelle (CTO of SlideShare) noted that from today, presentations containing bullet points will not be supported by SlideShare. Special algorithms based on Tufte’s groundbreaking work will parse the PowerPoint file and remove all bullet points, deceptive “chart junk”, and other elements that distract from a presentations effectiveness (*).

¿Será cierto? Quizá esta decisión produzca una concienciación a nivel mundial y un notable aumento de la calidad de las presentaciones ¿Dejaremos de hacer nuestras presentaciones con seis líneas (con viñeta) por diapositiva, seis palabras por línea, llenas de «clip art» y recuadros con fotos pequeñajas y con fondo de diferente color? ¿Dejaremos de usar esas estupendas plantillas del PowerPoint, que tan bien conoce todo el mundo (especialmente esa azul en la que pasan unas luces a toda mecha por la pantalla) y que impiden que cualquier persona normal distinga nada a más de 5 metros de la pantalla? ¿Se ha terminado aquello de leerle a la audiencia nuestro PowerPoint lo más rápido posible para cambiar de diapositiva cuando ellos y ellas estén a mitad de lectura? No lo creo… porque es mentira. No hay ningún algoritmo de detección de «bullet points».

Sin duda es una divertida broma, al menos para los que nos interesa el tema de las presentaciones, del día de los inocentes («April Fool») en el mundo anglosajón 🙂

Y por si alguien no le ve la gracia a la broma de SlideShare… aquí va un vídeo de una parodia de Don McMillan sobre presentaciones: Life After Death by PowerPoint.

 

 

Por si le interesa a alguien, el CENT organiza cursos prácticos sobre cómo hacer buenas presentaciones.

Addenda 7/4/08: Carles Bellver ha editado un poster que tenemos en el CENT para adecuarlo a esta entrada:

Bullet Point