Software libre

Microsoft Office en chino para la Comunidad Valenciana

El País de hoy (2/4/10) publica un artículo firmado por Jaime Prats y titulado «Microsoft acosa a Lliurex» en el que se explican algunos de los acuerdos entre la empresa informática y la Generalitat Valenciana en relación a la creación de un centro de innovación tecnológica Microsoft en Torrevieja. Entre ellos, el acuerdo firmado el pasado 26 de febrero por el consejero de Educación, Alejandro Font de Mora, y el director general de Microsoft en la Comunidad Valenciana, Carles Grau, «para traducir al valenciano el Office«. No es muy aventurado suponer que, si un consejero de Educación firma un acuerdo de este tipo es porque tiene la intención de que dicha aplicación se utilice… en educación.

¿Qué otras medidas comporta el acuerdo de la instalación del centro de Torrevieja con el aval de la empresa de informática? «Una multinacional lo que quiere, por encima de todo, es vender» apunta un alto ejecutivo de la informática. Por ello, según abundan fuentes del sector de la innovación y las nuevas tecnologías, la clave de este acuerdo está en la intención de Microsoft de estrechar las relaciones con la Generalitat y situarse como socio estratégico de la Comunidad Valenciana. Y esto no sólo implicaría ventas de programas, sino dar un golpe de timón de 180 grados respecto a la filosofía impulsada por la Generalitat en su apuesta por el software libre, en este caso, por el sistema Lliurex, frente a los sistemas de pago, del que el abanderado es, precisamente, el nuevo aliado: Microsoft.

El periodista de El País ha consultado a fuentes del sector para explicar qué implica el acuerdo de creación del centro de Torrevieja, más allá de la palabrería de las notas de prensa oficiales:

Traducido el mensaje por estas mismas fuentes, el acuerdo abre las puertas para que Microsoft se convierta en un socio privilegiado de la Administración valenciana y cierre el paso de otros sistemas (IBM, Oracle, HP…). Y no menos importante: regularizar las licencias Microsoft pirata que usa la Generalitat (ya que las administraciones pagan solo por las que declaran) -lo que no es poco-, y comprar nuevos programas. A todo ello se suma cortar el paso al software libre.

A todo eso, fuentes de la Consejería de Sanidad no ven ningún problema:

¿Sigue siendo válida esta apuesta [por el software libre]? La respuesta es afirmativa, según fuentes oficiales de la Consejería de Sanidad: «Volver a cambiarlo todo sería como tirar el dinero». Desde este departamento insisten en el apoyo a Lliurex, aunque dejando una puerta abierta. «Hay aspectos compatibles» que permiten trabajar con las dos opciones: Lliurex y Microsoft, señalan.

Probrecillos. En fin… Odio tener que recordarlo, pero ya lo dije en este blog: Adios a Lliurex (20/2/10).

Por otra parte, dado que veinte institutos valencianos impartirán chino mandarín en 3º y 4º de la ESO a partir del curso que viene (Levante 4/1/10) y que a Font de Mora le gustan las soluciones «todo en uno» («Educación para la ciudadanía» en inglés, por ejemplo), tengo una idea nos puede ahorrar mucha pasta: instalen Windows y Office en chino en todos los ordenadores portátiles de los alumnos y así los chicos y chicas valencianos aprenderán chino casi sin darse cuenta. Esperen… ¡si no tenemos portátiles! Ahora que caigo, no hemos firmado el convenio para el proyecto Escuela 2.0, que los portátiles de Zapatero son pequeñajos y malos. ¡Qué lástima! Por tanto, contraten buenos profesores y profesoras de chino.

¿Hacia dónde va la educación valenciana? El que lo sepa, que me lo cuente.

Software libre

Adiós a Lliurex

Toda la prensa recoge la noticia de la visita del presidente Camps a Bill Gates y la decisión de instalar en Torrevieja (Alicante) el «primer Centro de Innovación en Tecnología de la Salud» de Microsoft. No voy opinar sobre el sistema de salud valenciano, ni sobre la política de privatización de la gestión de hospitales construidos con fondos públicos, ni de listas de espera, ni de…

Conociendo a Microsoft, lo primero que he buscado en la prensa es cuánto nos va a costar la broma a los valencianos. La respuesta es fácil de encontrar : 800.000 euros anuales. ¿Y cuánto pone Microsoft? Porque no es la Fundación de Bill y Melinda Gates… es Microsoft. Es más, al ser financiado con fondos públicos, ¿todo el software que se desarrolle será libre?

Queda dicho y es lo que pone en todos los periódicos. Pero lo que no dicen la mayoría de ellos (el ABC sí que lo dice) es este «pequeño» detalle:

Microsoft en valenciano
De la reunión entre Gates y Camps también salió el compromiso de la empresa informática de incorporar, a partir del próximo mes de abril, el valenciano a los idiomas disponibles en los programas que distribuye la empresa informática más importante del mundo.

A ver. ¿Bill Gates se ha comprometido a incorporar el valenciano (sic) a «los programa que distribuye la empresa informática más importante del mundo»… a partir de abril? ¿Esto lo ha dicho Camps a la salida de la reunión? Me parece que o no era agua lo que se ve en las fotos o el traductor/a ha patinado. Quizá Bill Gates ha dicho que se lo comentaría a Steve Ballmer cuando lo vea.

Si Camps  suelta más pasta, Bill Gates cambiará «Desar» por «Guardar» en la traducción catalana de lo que ya tenga traducido (¿tiene algo? ¿Windows 3.11? ¿aquella que le sacó a la Generalitat de Cataluña?) y, a cambio de una promesa, el año que viene todos los ordenadores que compre la Conselleria de Educación para los centros llevarán arranque dual. Es decir, es el fin del software libre en la educación valenciana, de Lliurex y de los proyectos que impulsó Esteban Gonzalez Pons cuando era la mano derecha de Camps.

Si a eso unimos las intenciones del PSOE, evidentes en lo que ha hecho con el proyecto Escuela 2.0 en el territorio MEC de Ceuta y Melilla, pasándose por el forro sus repetidas promesas electorales, pese a las declaraciones de Leire Pajín (alicantina, por cierto), el panorama para el software libre en estas tierras es de color negro. ¿Y saben qué pasará? Que todos los docentes que han invertido miles de horas en aprender a usar Lliurex, que han desarrollado aplicaciones y recursos con las herramientas de Lliurex se quedarán con un palmo de narices. Una vez más. Y a muchos y muchas ya no los encontrarán para nada. Quizá los vean en algún curso de macramé del centro de profesores más cercano, para hacer las horas que manda la ley.

Si lo que publica el ABC es cierto, hoy, 20 de febrero de 2010, es el principio del fin del software libre en las escuelas valencianas.

La peor crisis que vive nuestro país no es económica, es de inteligencia.