Nuevo artículo en El País, sin desperdicio, sobre los planes de Gobierno para «digitalizar» la escuela. Basta el último párrafo para comprender la auténtica naturaleza del plan (perpetuar un modelo de negocio basado en el papel y la imprenta, prescindiendo de cualquier otra consideración) y su potencial para hacer avanzar nuestro país hacia la sociedad de la información (ninguno). No me resisto a copiarlo:
Las editoriales trabajan en el desarrollo de paquetes de materiales digitalizados, cuya novedad sería que los libros electrónicos llevan implantados un gestor (un hardware) que contiene una licencia personal para cada usuario. El niño al entrar en el ordenador introduce la contraseña que va en su licencia y empieza a trabajar en su libro digital. El gestor sirve también para que el profesor controle lo que hace cada niño en su ordenador. El ministerio está en contacto con las editoriales para ayudarlas a impulsar la renovación de su sector. El paquete contempla complementos, como diccionarios, recursos didácticos de ampliación y refuerzo y un abanico de actividades que dependen de la habilidad de cada niño. Lo que aún falta por definir es cuál es el precio de mercado de la licencia del libro digital.
Se llamará «escuela dospunto libro de texto digital». Y por si no te has dado cuenta, aparte de la perversión económico-social-populista, aparte de no entender que la tecnología no obra milagros en el aula, aparte de… muchas cosas más, hay un gran cambio metodológico, pedagógico y didáctico oculto en esta «fantástica propuesta» de nuestro gobierno: un giro de cuello de aprox. 90º, es decir, a partir de ahora el alumnado no leerá en la mesa, leerá, lo mismo eso sí, pero en la pantalla del ordenador. Eso es constructivismo, eso es hacer que el alumnado sea protagonista de su aprendizaje. ¡Sí señor! ¡ZP ha dado usted en el clavo!
Casi calcado de la situación planteada en «El derecho a leer» de Richard Stallman (escrito en 1997, adelantándose al futuro por lo que se vé). Y como les dejemos, llegaremos al escenario que se plantea en dicho relato.
Saludos.
¿Y los cincuenta euros? serán para pipas, digo yo. Con eso ya digitaliza el sistema educativo. Cuanto más se dice al respecto menos de acuerdo estoy.
Cero a la izquierda, los profes, que no pintan nada en este cotarro; cero a la izquierda, los alumnos, que vuelven a convertirse en consumidores a su pesar… ya lo ves, escuela dos putos ceros, como tú dices.
En Cataluña las escuelas públicas han iniciado un programa de «socialización de libros de texto» en el que se reaprovechan los del curso anterior que están en condiciones. El objetivo es doble: ahorro para las familias y educación en el cuidado y valor de las cosas (todo tiene un coste, y un precio).
http://mediambient.gencat.net/esp//ciutadans/educacio_ambiental/escoles_verdes/socialitzacio.jsp
Qué pasará con el plan ZP? Habrá un reaprovechamiento de las licencias? Serán más baratas para un segundo uso? No tiene sentido alguno y no se han dignado a estudiar iniciativas como las que he comentado.
Yo creo que es 2.teletubis.
Siempre que los politicos han decidio hacer algo en educación la han cagado pero a base de bien, vease LOGSE, LOE, LOCE, LOU, bolonia y etc…
El PSOE vive en los mundos de yupi y el PP quiere cargarse todo lo público, al final entre unos y otros lo van a conseguir.
Cada vez tengo menos claro que nuestros dirigentes sean algo más que borricos subidos a un poste demasiado alto para ellos. Llevo años utilizando las TIC en mis clases, desarrollando recursos, etc, y ellos ignorando todo ese trabajo. Y ahora se les ocurre esto, sin consultarnos, sin tenernos en cuenta, y, como siempre, que os apostáis a que nos cargan la responsabilidad.
Por favor, que les paguen el sueldo y se vayan al bar y no hagan nada más. Si no podemos quitarlos de en medio, que por lo menos no hagan más daño.
Todo son buenas intenciones, pero se quedan en eso. La educación no es el material con el cual se lleva a cabo la formación de los alumnos. Debemos entender, primero, que educación y economía son dos términos que no deberían ir parejos, pero eso es difícil en una sociedad en la que todo tiene un precio. Seguramente se venderá la siguiente renovación pedagógica al mejor postor (la del libro electrónico) sin enjuiciar si realmente es productora de educación.
Totalmente de acuerdo con Antonio (repasodelengua.blogspot.com). Convierten la escuela en un producto de consumo.
Pero lo alucinante es que tenemos las herramientas para dar una alternativa. Y la gente. Pero no la organización. Que es precisamente lo que aportan las empresas. Si contáramos con una organización sería muy fácil desbordar cualquier oferta de cualquier editorial. Nadie tiene dinero para pagar a 100 profes trabajando juntos. Básicamente, porque eso se hace gratis, o no se hace.
Porque no es el material, son los usos, son las redes de gente alrededor del uso. Los alumnos aprenden juntos o no aprenden. Porque las competencias sólo se desarrollan con otros. ¿Dónde está la interactividad de esos materiales? Y, aunque la tuvieran. ¡¡¡Entonces, lo que tendría valor es el uso, no el material!!! Las editoriales tendrían que pagar a alumnado y profesorado por hacer ricos los materiales a base de uso, y no a la inversa…
Es inevitable vamos hacia el futuro y lo bueno de todo esto es que, aquellos seres que nos dan oxígeno van a descansar un poquito de nuestra acciones destructivas. Dejemonos de tonterias y adecuemos nuestra forma de vida a nuestro entorno y no social