Escuela 2.0

Libros de texto digitales: la opinión de los alumnos

Un artículo de La Vanguardia de hoy titulado «Una encuesta a alumnos de ESO que trabajan con portátil destaca que a la mayoría no le gusta el libro digital» desnuda de nuevo las carencias de un modelo de «digitalización» de las aulas que no propone cambio didáctico alguno.

Maria Teresa Xanxo, profesora de Tecnología y Ciencias Naturales del IES Joan Miró de Cornellà de Llobregat encuestó a 153 de sus alumnos para averiguar cómo ha cambiado sus hábitos de estudio y qué provecho le sacan a los portátiles.

«Un libro digital en PDF es igual que un libro en papel, no aporta nada que no tuviéramos antes, los materiales educativos del ordenador son muy mejorables”, opina Xanxo. Tanto ella como los estudiantes, según se desprende de la encuesta, están a favor de las nuevas tecnologías. “Tener un ordenador o varios en el aula, con conexión a internet, es imprescindible; yo utilizo el mío constantemente cuando doy clase porque te da muchos más recursos para enseñar, pero quizás nos hemos equivocado en obligar a que todos los alumnos tengan su propio portátil en el aula. Para ver un vídeo, entrar en una página web o hacer unos ejercicios no hacía falta pagar un ordenador a cada niño, todo eso podemos verlo en clase con algún portátil de apoyo y un proyector o pueden hacerlo ellos en casa con el ordenador familiar; eso sí, habría que proporcionar un ordenador al alumno que no tenga recursos para comprarlo”, reflexiona esta profesora, ingeniera de formación.

Nuevamente se hace evidente que cierta manera de entender el trabajo en el aula, común a muchas aulas de la ESO y el bachillerato, no solo no se beneficia de los portátiles y la conexión a Internet, sino que directamente se ve entorpecida por la tecnología. No es extraño. Después de varios cientos de años de libros de texto y libretas, de liturgia (lecturas, salmos y homilía), de repente los fieles se nos aburren y se conectan a Facebook.

Las conclusiones de estos análisis, ninguna sorpresa, acaban cuestionando si es necesario dotar de un portátil a cada alumno. El mío es que cada día es más necesaria una revolución didáctica en secundaria. Podríamos empezar replanteándonos los horarios. Pero es que yo soy pedagogo y ya se sabe: no tengo ni idea de nada.

 

 

Gracias a @patxigu por tuitear el artículo.

17 Comments

  1. Benvolgut Jordi, mentre començo a escriure aquestes línies salta el tweet d’en JQueralt http://bitacolajqueralt.blogspot.com/2011/03/es-mejor-el-libro-de-papel-no-hay-nada.html que ve a explicar més o menys el que jo volia dir.

    Només vull afegir, que aquesta enquesta que ha passat aquesta professora fa referència als seus alumnes del seu centre que, vulgui o no, estan condicionats per les opinions i les accions del seu professorat.

    Llegint el text de l’autora de l’enquesta i el text de les preguntes de la pròpia enquesta el que jo observo és una metodologia inadequada en l’ús d’un ordinador per alumne. Cosa que mai em qüestionaria del projecte, podria qüestionar el maquinari que s’ha fet servir, sobretot per gestionar la connectivitat, com ara els Routers, Pròxys, Balancejadors de càrrega, Sistemes de QoS, etcètera.

    I aquí és on els que tenim la certesa que la pedagogia hi té molt a veure HEM DE FER pedagogia, hem de donar alternatives, presentar metodologies, mostrar exemples. Ser constructius.

    És molt fàcil fixar-se en què va malament i deixar-ho anar, ràpidament la societat se’n fa eco i la sensació que es dóna és que s’ha invertit una gran quantitat de recursos públics en una cosa inútil, o el que és pitjor: perniciosa pel jovent. Per contra se senten poques veus que reconeixent les greus mancances del projecte, aposten per ell i troben vies d’explotació que milloren la seva praxi docent i l’aprofitament per part de l’alumnat.

    Ve a ser com si a algú que mai ha pujat en bicicleta, ni ha vist a ningú anar en bicicleta li’n donen una. Depenent del seu caràcter a la primera hòstia maleirà el dia que ho va intentar o seguirà dale que te casco hasta que un dia faça el caballito.

    Gràcies per fer el caballito amb el teu bloc.

  2. Da gusto que antes de cocinar esté usted tran prolífico amigo, pero que sepa que esto nos limita a los demás porque no podemos despegarnos de su blog y engancharnos a la cocina. Jajajaja.
    Voy a lo que voy. Llevo tiempo rumiando esa idea de los horarios en Secundaria y de hecho hace unos días lo expresaba en Twitter. Yo creo que ganaríamos mucho si toda nuestra jornada laboral se desarrollara en los centros, de 8 a 15. Tendríamos más momentos para el trabajo en equipo, por departamentos, por equipos educativos o por comisiones de trabajo. No es trivial el sudoku pero si más posible que con el horario actual que creo que promueve en los profes de secundaria la metodología del francotirador, metodología que, sinceramente, agota y no creo que esté dando muchos resultados.
    Eso sí, un horario así requiere que los centros estén dotados con espacios y medios para que podamos reunirnos, estudiar, conectarnos a Internet, etc. Si no, es mejor irnos a casa. Me temo que los centros, como dice mi amigo Jesús Peñas, son cada vez más, simples aularios y eso tampoco ayuda.
    En fin Jordi, seguimos, un abrazo y gracias por darnos motivos para la reflexión y el debate.

  3. Pienso que lo realmente interesa es el debate sobre l tema. Se ha de hablar mucho del 1×1 pero tenemos poca perspectiva para hacerlo ya que llevamos poco tiempo y el proceso ha tenido, y tiene, ruidos de fondo que lo enmascaran.
    -La conectividad, algo básico, no está resuelta de una manera global resuelta.
    -Las editoriales han entrado a contrapie digitalizando sus contenidos de siempre y añadiendo actividades, algunas de ellas de escasa calidad. Vienen a ser más de lo mismo en formato digital.
    -Ha de haber un proceso que haga ver a nuestro alumnado que lo que tienen entre manos no es un juguete, si no una herramienta más que les ayude en su proceso de aprendizaje, cultura digital en definitiva. Si el uso que hacen en su casa de un ordenador és mayoritariamente el Facebook o el Mesenguer, disponemos de cantidad de recursos 2.0 que nos han de permitir darle la vuelta a la situación.
    – Las editoriales pueden seguir con sus propuestas, pero los/las que hace tiempo abandonamos los libros disponemos de herramientas y espacios que nos permitan didàcticas más abiertas y adecuadas a las distintas realidades con las que nos encontramos en nuestras aulas. No podemos perder esta oportunidad para iniciar cambios profundos que el sistema y nuestro alumnado necesitan

  4. Pues fíjate que bien viene hoy el artículo de Paul Krugman (http://www.elpais.com/articulo/economia/global/Titulaciones/dolares/elpepueconeg/20110313elpnegeco_3/Tes) acerca (así lo entendí yo) de aquella gente que esté formada en un uso pasivo de la información, en que te limites a transmitir fielmente lo recibido (aunque sea seleccionando).

    Para mí que el mundo requiere que el usuario añada valor a la información que usa. Y eso está siendo complicado de explicar a un profesorado empeñado tanto en actuar así como en impedir que lo haga su alumnado (se reserva el papel de añadir valor a la información a la vez que impide que otros lo ejerzan).

    Qué domingo…

  5. Estoy de acuerdo (en parte) con tu discurso. Los libros electrónicos son más de lo mismo. Pero eso no significa que sea malo. Se reduce peso, se integran materiales, se comienza a familiarizar al alumno con los ordenadores…. Por supuesto se está infrautilizando una potente herramienta didáctica, pero es un primer paso que nos permitirá evolucionar.

    Yo estoy cansado de asistir a conferencias de «pedagogos» que hablan de las maravillas de las nuevas tecnologías: Moodle, redes sociales, flash, … Pero no os dais cuenta que los profesores que estamos comprometidos con las nuevas tecnologías seguimos sin disponer de ordenadores en las aulas. Así que cada vez que oigo en una conferencia que los profesores de secundaria seguimos anclados en el método clásico de enseñanza me entran ganas de vomitar. Especialmente cuando las críticas vienen de alguien sin experiencia en las aulas.
    Actualmente debemos diseñar nuestras clases por duplicado: Por si está disponible el aula de informática y por si no lo está.

    La metodología comúnmente empleada en nuestras clases no es «mala» en términos absolutos. Evidentemente hay mejores y peores profesionales, pero en general, es la mejor posible con la legislación y los medios que hay.

    Te sigo desde hace tiempo en tu blog y creo que sería muy positivo para todos que los teóricos de la enseñanza fueseis más constructivos y más «didácticos» y aportaseis ejemplos y experiencias concretas que se puedan valorar. Porque a veces parecéis el PP: todo mal, pero ninguna propuesta…

    Ah. Y una última cosa. Te recuerdo que los profesores que están aplicando actualmente el 1×1 son MAESTROS!!!! (grandes expertos en pedagogía), aunque estén impartiendo temporalmente en 1er ciclo de secundaria.

    Que conste que te envío un cariñoso saludo. A pesar de todo me gusta tu blog 😉

    1. Hola,

      Creo que no estamos de acuerdo en un aspecto importante: yo si que creo los libros de texto, en papel o digitales, son nefastos. Implican una pedagogía escolástica que ha desprofesionalizado a los docentes. Como ya lo he explicado muchas veces en este blog, no me repetiré. Por otra parte, descalificar a los «pedagogos» que «hablan de las maravillas de las nuevas tecnologías» porque no nos damos cuenta de que no tenéis ordenadores en las aulas es un poco absurdo. Claro que nos damos cuenta. Nos damos cuenta de que hay quien no quiere ordenadores y se los ha tenido que «tragar» y otros que quieren pero no pueden disponer de ellos.
      A mi lo que me indigna es cuando no tenemos ninguna responsabilidad por nada, la culpa es de todos menos de uno mismo y cuando no se ve ninguna posibilidad de mejorar la propia práctica. La legislación y los medios disponibles permiten muchas maneras de enfocar la docencia. El problema es: a) si sabemos; y b) si tenemos el coraje de atrevernos. Que cada palo aguante su vela. La administración, que se merece muchos palos en ocasiones, no es la responsable de todo: hay una parte que nos toca a los docentes.

      Saludos cordiales y no dejes de leer mi blog porque no estemos de acuerdo en algunos temas. Y sigue comentando tanto lo que te parezca bien como lo que te parezca mal 😀

      Psd.: Lo de los/las maestros/as en el 1×1 creo que debe ser en tu instituto.

  6. Hola de nou Jordi. M’estic aficionant al seguiment del teu bloc.
    Jo només puc aportar la meva » més que modesta» opinió sobre aquest article. La meva opinió al respecte dels llibres de text és que qualsevol llibre forma part d’una temporalització efectuada per algun savi( o no???)sobre una seqüenciació de continguts, totalment descontextualitzada, ja que, tot i que dues escoles puguin tenir el mateix llibre, no hi hauran mai dues escoles iguals, ja sigui per la seva realitat, la seva idosincràcia, el seu context, les seves famílies…

    Respecte a l’opinió anterior de G, no vull pensar que l’1×1 ha estat beneficiós només per evitar pes a les motxilles, o fer familiaritzar els alumnes en l’ús de les noves tecnologies… Si és així, crec que tenim un problema, doncs no calia fer tant de rebombori, i en comptes d’ordinadors, podíem haver invertit en motxilles amb rodes; o en comptes d’ordinadors portàtils, el departament podria haver destinat aquets diners en formació…

    En fi, que tal i com està el panorama actual, no vull pensar que els nostres educadors encara no estan familiaritzats amb l’ús dels ordinadors; no vull pensar, que la societat demanda, a un ritme trepidant, informació i coneixment actualitzat i modernitzat, podem estudiar com es formen els Tsunamis, com aprendre cooperativament, compartir un projecte amb d’altres escoles…, o podem estudiar la «Lista de los Reyes Godos» ( que a mi no m’ha servit de res). També vull fer constar, que els alumnes ja n’estan de familiaritzats en l’ús dels ordinadors, els que no ho estan actualment són alguns mestres.

  7. Hola Jordi, 
    El meu nom és Rafa Rubio i soc professor d’informàtica a secundària. Des de fa un temps segueixo els teus posts, amb no massa regularitat certament, però incrementada arran d’una xerrada que vares oferir recentment a la URV (un perfecte exemple d’homilia, he de dir) i de seguir-te al Twitter.
    Una de les coses que he estat observant és l’excessiu ‘bonrotllisme’ que hi ha al teu voltant, cosa que m’ha fet decidir a fer una miqueta de contrapunt.

    Comencem:
    – De la lectura d’alguns tuits i posts puc observar una marcada tendència a fer ús de la paraula MESTRE (en ocasions en majúscules, com ara) en contextos possitius, i de la paraula professor en contextos negatius, per referir-se a docent.
    – Eres una mica recurrent sobre certs temes (renovació pedagogia a secundària, redefinició de l’horari a secundària) tinguen a veure o no, com ara aquest post, on una qüestionable i limitada enquesta, no només dona peu a un diari a publicar un article on, com no pot ser d’una altra forma, apareix l’expressió  ‘falta de formación del profesorado’, sinó que, a més de fer-te’n ressò, et serveix d’excusa, una vegada més,  per introduir dites idees.
    – Percebo, a més, una confiança excessiva en les noves tecnologies i en el paper que han de jugar en els processos d’ensenyament-aprenentatge. I dic excessiva atenent al fet que el seu dinamisme, el de les noves tecnologies, vull dir, limita molt l’adequada valoració del seu impacte global a mitjà i llarg termini.
    – Hi ha excessiva crítica als ‘mètodes tradicionals’, en la mateixa proporció que manca per a les noves tecnologies. És que ningú no s’en adona que un xiquet amb un blog no és un menor que escriu un diari que amaga al calaix de la seua tauleta de nit, sinó un menor que comparteix amb el món i, segurament, amb l’eternitat parts de la seua vida? És que ningú no es qüestiona les possibles conseqüències, presents i futures, que això pot comportar per a un nen que no està preparat encara per a valorar ni gestionar adequadament la seua empremta digital?

    Jordi, no és que no tingues ni idea perquè sigues pedagog, però sí crec que, possiblement per interès professional, no sols ser massa objectiu en les teues valoracions.

    Una mica fora de tema, ho sé, però es tracta d’una crítica constructiva general, i així m’agradaria que fora entesa.

    1. Hola Rafa,

      Gracies pel teu comentari. Segurament provenim d’ambients professionals diferents i les nostres percepcions sobre l’ensenyament i l’aprenentatge i sobre el paper i possibilitats didàctiques de les noves tecnologies difereixen. Suposo que soc recurrent en molts temes com tothom: tinc les meues dèries… com tothom. I segurament has «detectat» algunes d’elles. Sobre l’objectivitat, només una apreciació: no crec en l’objectivitat més que com desig, crec més en l’intersubjectivitat: crec que podem dialogar i posar-nos d’acord en moltes coses. Per a això tinc un blog (que no és mai el mateix que un diari privat). Encara que tal vegada no ens posem d’acord amb altres. Sobre la pedagogia, estic un poc fart de cert discurs, molt habitual en alguns àmbits de secundària (hi ha algun llibre i tot) que te la culpa de quasi tot. Crec que mestre/a o professor/a és una profissió molt complicada i que llençar a les aules a gent sense preparació específica per a dita professió i deixar que la «reinventen» per ells o elles mateixos és una errada garrafal.

      Segurament en un tema estem d’acord: amb un 32% de abandonament dels estudis (El Pais d’avui) alguna cosa estem fent malament.

      Salutacions.

  8. Hola Jordi,
    Jo crec,  per la meua formació matemàtica, en l’objectivitat com el millor instrument d’anàlisi dels problemes, i en la subjectivitat com a mecanisme en la recerca de les solucions. En qualsevol cas, sí hi ha acord en que alguna cosa estem fent malament… assumint, però, que estàs considerant la versió ampliada del conjunt de pressumptes culpables.

    La intervenció formativa és, segurament, el procés amb major complexitat de tots els que escometen les societats actuals. Abasta un ample període de temps, al llarg del qual hi intervenen una gran quantitat de professionals diversos, canviants polítiques educatives, diferents corrents metodològiques, i que es veu molt influenciada per la responsabilitat educativa dels pares i els valors que projecten els mitjans de comunicació de masses i la societat en conjunt.

    Aquesta complexitat és, però, un tret comú a totes les ciències socials, què tenen com àmbits d’estudi sistemes amb incontables variables i inabastables formes d’interacció, mutables, a més, en mode o intensitat amb el temps. És per això, que les ciències socials sempre presenten avanços dificultosos i erràtics. A diferència de les ciències experimentals, on les simplificacions comporten solucions acceptables i aplicables, què impliquen millores continuades, quan no dramàtiques, fer simplificacions en les ciències socials per determinar estratègies de resposta adequades pot suposar comprar un bitllet cap al fracàs més absolut.

    Considere, en conseqüència, que experiments a gran escala, com ara la implantació generalitzada dels programes 1×1, són un despropòsit. No és que no aprecie com necessària o valuosa  la implantació de les noves tecnologies a l’ensenyament, és que és del tot natural i inevitable. El què cal, però, és estar ben segur que el seu ús va a conduir cap a un benefici clar, i no perquè tinga dubtes al respecte, sinó perquè s’ha de procurar que tots els factors que hi intervenen, què són molts més dels què habitualment se solen considerar, reforcen i no entorpeixen el procés. En cas contrari estarem posant en perill el futur de tota una generació.

    T’estic molt agraït, Jordi, per obrir la porta al debat encaixant les critiques tan generosament.

    1. Ja hauràs llegit al meu blog les meves critiques a Escola 2.0 i a Educat 1×1. No cal insistir. Però no recordo cap reforma educativa demanada pels professors. Mai. Enlloc. Per qué serà?

  9. No, Jordi, no he llegit les teues crítiques a l’1×1. No et segueixo tant.
    Però no es tractava d’això. Novament he de dir-te que erres en la teua  anàlisi. I simplifiques.

    A més, m’ha sorprès la teua resposta, argumentalment tant limitada. Tal vegada siga perquè estàs masa ocupat, o tal vegada siga perquè, una vegada més, aprofites que plou per posar-te les ulleres de sol.

    Anem a esbrinar-ho:

    Per què no hi ha cap reforma educativa demanada pels professors?

  10. Totalmente de acuerdo con el artículo.

    En estos días estoy recibiendo las propuestas didácticas de las editoriales para proponer los libros del curso que viene. Su «apuesta digital» no es más que un acceso web a un pdf enriquecido, pero efectivamente, en el fondo, no cambian nada. Algún enlace desde el libro, mucha información y poca acción para el alumno/a. Creo que esta no es la forma de proponer aprendizaje en los tiempos que corren.

    Y además: ¿obligamos a los alumnos a tener un portátil para eso? Y al ser tan tecno-dependientes, ¿ qué ocurre cuando te falla el acceso a internet?

    Como dice mi suegro: «para este viaje no hacen falta alforjas».

    Saludos.

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