La semana pasada estuve en el III Congreso Escuela 2.0 en Granada. Hubo muchas cosas interesantes (Juanma Díaz @juanmadiaz ha publicado una excelente crónica en tres partes: I, II y III). Una que no me perdí (y en primera fila 🙂 ) fue la presentación de los resultados iniciales de una encuesta sobre «¿Qué opina el profesorado sobre la Escuela 2.0?». Manuel Area (@manuel_area), el director del proyecto, nos proporcionó los primeros datos de una encuesta (el vídeo y la presentación utilizada pueden verse en su blog) a una muestra de 4.500 docentes de (casi) toda España (véase en la presentación los detalles técnicos) realizada en el marco de un proyecto de investigación de tres años de duración financiado por el Plan Nacional de I+D+I del Ministerio de Innovación y Ciencia.
Los resultados no son sorprendentes, aunque, en algunos aspectos, lo que son es preocupantes. Por ejemplo, algo esperable, hay notables diferencias en cuanto equipamiento entre las comunidades participantes en el proyecto Escuela 2.0 y las que no han participado (algún político debería dar explicaciones) o van más retrasadas en su implantación (diapositiva 12), no me sorprende la «pujanza» de los libro de texto de papel (diapos 14, 25 y 26 ) pero, por contra, los profesores son muy favorables a crear e intercambiar materiales didácticos por Internet (diapo 29) (¿no es un tanto contradictorio? ¿libro=red de seguridad?), el tipo de actividades (de muy bajo nivel) que se realizan en clase con los ordenadores (diapos 16 y 17), la escasa deseabilidad de un ordenador por alumno (diapo 30), el «ni fu ni fa» de la web 2.0 en clase (diapo 31), etc. Las conclusiones, en las diapositivas 45 y siguientes, son las siguientes:
- No hay una visión homogénea del profesorado ante las TIC y la Escuela 2.0.
- Existe variabilidad y diferencias significativas entre Comunidades Autónomas y Etapas (Primaria y Secundaria).
- Mejores valoraciones hacia Escuela 2.0 del profesordo de Primaria que del de Secundaria.
- Hay mucha tecnología en las aulas, pero no está lograda la plena disponibilidad… y se reclama más.
- Se usan las TIC pero hay poca innovación didáctica.
- El profesorado tiene una visión positiva hacia los efectos de las TIC.
- A pesar de la abundancia de TIC, el libro de texto y la pizarra tradicional son los recursos más empleados diariamente.
- El coordinador TIC es necesario.
- El profesorado cree que tiene formación suficiente, pero demanda más.
- El profesorado es crítico con la política formativa en TIC de su comunidad, que considera entre «regular y aceptable».
- El profesorado quiere recursos online libres y compartidos.
- No hay «visión»: El profesorado dice que le falta información sobre objetivos y características del proyecto Escuela 2.0.
Hasta aquí algunos de los resultados preliminares de la encuesta, «fusilados» directamente de la presentación de Manuel Area. Faltan analizar , cruzar y publicar muchos datos, que serán muy interesantes (atentos al proyecto, pues). ¿Y qué podemos concluir?
Han pasado dos años, los resultados son los que son. La botella está medio llena o medio vacía. No tenemos datos anteriores para comparar, pero una minoría muy interesante de docentes están abriendo camino a la innovación didáctica con TIC, otros, quizá demasiados, desearían jubilarse antes que tener que aprender nada nuevo o cambiar su manera de hacer en las aulas, todavía no tenemos una visión compartida y generalizada de para qué sirve todo esto, no se han cambiado muchas creencias pedagógicas de los docentes, solo nos hemos preocupado de sus competencias técnicas en la esperanza de que la innovación didáctica y la calidad vendría sola (la hipótesis del campo de maíz: «Si lo construyes, ellos vendrán», criticada constantemente en este blog). Hemos tenido demasiados debates sobre ancho de banda y mantenimiento de equipos, algo de lo que no se debería hablar porque esté garantizado. Seguimos teniendo demasiados discursos sobre pizarras digitales «motivantes» que no cambian nada, sobre libros de texto «digitales» para hacer lo mismo que antes, pero online, multimedia y con ejercicios autocorrectivos, como si eso fuera a cambiar algo. Hay demasiados intereses creados en las industrias «escolares» tradicionales, que empujan hacia el pasado, época dorada en la ganaban tanta pasta. También tenemos demasiados discursos tecnocéntricos de las «otras industrias» que prometen maravillas si les compras sus cacharros (que son tan fáciles de usar que no tendrás que cambiar nada en tu manera de dar las clases). Es la hora de hablar de didáctica, de enseñanza y de aprendizaje.
Odio tener que decirlo, pero…ya te lo dije, Zapatero, aunque entonces también dejaba una puerta abierta a la esperanza. La misma que sigo teniendo hoy. Quizá solo somos un 5% del profesorado los que creemos que las TIC pueden ser revolucionarias en la escuela, pero estamos convencidos y decididos. En primer lugar a aprender y a mejorar nuestra práctica, integrando junto a los nuevos medios y herramientas, los conocimientos, actitudes y valores necesarios para formar jóvenes críticos y reflexivos que vivan en el presente y el futuro y que sean capaces de resolver los terribles problemas que les dejamos en herencia. Y, en segundo lugar, a compartir lo que hemos aprendido y a ayudar a nuestros compañeros y compañeras que así lo deseen a recorrer juntos el camino. El sistema no ayuda mucho, lo comprobamos cada día. Pero estamos decididos a cambiarlo. Y un sitio en el que es fundamental hablar de todos estos temas es donde tengo la suerte de trabajar: la formación inicial de maestros y maestras. Llamadme iluso, pero es porque tengo ilusión… a pesar de los nubarrones que se ven en el horizonte.
Y, hablando de nubarrones, permitidme una reflexión final offtopic. Se acercan las elecciones. Supongo que lo habréis notado :-). No voy a decir a quién debes votar, tu sabrás, pero sí a quién no debes votar. Si crees que la educación es importante y que una escuela pública de calidad es la única base sobre la que se puede construir una sociedad democrática y sin exclusiones, si eres padre o madre y quieres que tus hijos tengan las mismas oportunidades educativas que los hijos de los que tienen más que tu, si estudias para maestro o maestra y crees que una condiciones dignas de trabajo son imprescindibles para lograr una educación de calidad, el 20N no puedes votar a quien quiere acabar con la escuela pública y ve en la educación (y en la sanidad y las pensiones) solo «oportunidades de negocio» para sus amiguetes o la escuela como un lugar de adoctrinamiento en la «única verdad». Y por principio, no votes a quien no dice cómo va a solucionar los problemas. No des cheques en blanco. Si no lo dice, seguramente es porque si lo dijera no le votaría nadie. Claro, clarinete.
Tu ilusión en estas cosas no es ilusión: es realismo. Propongo que en vez de Novadors lo llaméis Realistes. La innovación pedagógica es «pedagogía» y todo lo demás, «historia de la pedagogía». Pongo un ejemplo (uno más) de otros campo, que indica hasta qué punto esto ya es real: he tenido hace poco una discusión intensa y civilizada sobre la conveniencia de gestionar en web una comunidad de propietarios. Lo interesante es que las personas que defienden con pasión seguir usando papel y sellos lo han hecho A TRAVÉS DE CORREOS ELECTRÓNICOS. Cuanto más se oponían, más sentido daban al foro online. Inimaginable hace pocos años.
Saludos Jordi,
Veamos,frases del artículo que señalaría en negrita porque no solamente es verdad sino que además es ¡¡¡VERDAD!!!
«…una minoría muy interesante de docentes están abriendo camino a la innovación didáctica con TIC, otros, quizá ¡¡¡demasiados!!!, desearían jubilarse antes que tener que aprender nada nuevo o cambiar su manera de hacer en las aulas…»
Tan claro como el agua cristalina que debiera haber en nuestros ríos,perdón,he querido decir por nuestros barrancos (Canary Islands).
«Quizá solo somos un 5% del profesorado los que creemos que las TIC pueden ser revolucionarias en la escuela, pero estamos convencidos y decididos».
Faltaría más,convencidos,decididos y a por todas,pese a quién pese.
«El sistema no ayuda mucho, lo comprobamos cada día. Pero estamos decididos a cambiarlo…»
¿Por qué? Porque tenemos ILUSIÓN y MOTIVACIÓN.¿De dónde? Del feedback continuo y permanente en Twitter,facebook,blog,web educativas y bla,bla,bla.
Pd.- Jordi,EDMODO va a triunfar como plataforma educativa.Sube como la espuma y aquí en España crece aritméticamente .En USA,Australia y Canada su crecimiento es exponencial.
«Han pasado dos años, los resultados son los que son. La botella está medio llena o medio vacía. No tenemos datos anteriores para comparar, pero una minoría muy interesante de docentes están abriendo camino a la innovación didáctica con TIC, otros, quizá demasiados, desearían jubilarse antes que tener que aprender nada nuevo o cambiar su manera de hacer en las aulas, todavía no tenemos una visión compartida y generalizada de para qué sirve todo esto, no se han cambiado muchas creencias pedagógicas de los docentes, solo nos hemos preocupado de sus competencias técnicas en la esperanza de que la innovación didáctica y la calidad vendría sola (la hipótesis del campo de maíz»…solo comentar este paágrafo y decir que como ya te dije alguna vez, la sociedad ahora no camina lentamente, va a velocidad de crucero y los cambios vienen rápidos, queramos o no… O los protagonizamos nosotros, o lo harán otros, gracias.
Juandon
Sin duda preocupantes los resultados de la encuesta, Jordi.
¿Y qué tal un marco de referencia de la competencia digital con descriptores evaluables para cada materia y nivel?
Me sorprende que el estudio no investigue las dimensiones y capacidades que componen esa competencia básica y su grado de desarrollo e integración en las programaciones gracias a los nuevos medios.
Urge que los docentes tengamos bien especificado en qué consiste la competencia digital (del mismo modo que sabemos en qué consiste la competencia lingüística o matemática) y que tengamos descriptores integrables en la programación de todas las materias y niveles.
¿Alguien está haciendo esto?
Me temo que los «docentes más TIC» se dedican en su mayor parte a crear tutoriales de herramientas y a repetir hasta la saciedad que es necesario un cambio metodológico hacia el rol del profesor como guía del aprendizaje, sin especificar mucho más. Y esto en bastantes ocasiones se concreta en hacer una selección de jclics, ardoras o «patatas calientes» con un «edilim interactivo» de colorines como colofón, en el mejor de los casos, aunque para eso ya están las «editoriales digitales» (con sus docentes creadores a destajo) que generosamente han participado en los generosos concursos de creación de materiales educativos digitales (alguna creada «ad hoc», que todo hay que decirlo y no es difícil investigarlo).
No faltarán los que señalen los datos de cualquier evaluación de diagnóstico nacional o internacional para concluir que los resultados son peores en los sitios donde se han utilizado medios tecnológicos de forma generalizada. Y, claro, también sabemos que los resultados dependerán de qué y cómo se evalúe.
¿Tenemos descriptores evaluables para la competencia digital? ¿Alguien la evalúa? ¿O se ve sólo como algo instrumental que debe servir para mejorar otros aprendizajes?
Tal vez sea una de las razones por las que la encuesta indaga más en opiniones que en objetivos programados y resultados conseguidos.
Soy un profesor de Primaria. Reflexiono sobre tu entrada de hoy en el Blog. Necesidad de terapia. Para mí y para mis compañeros y compañeras propongo una bien planificada etapa de des-aprendizajes. Desaprendido el dogma del magisterio, y vacíos de otros aprendizajes…, nos impondremos una nueva manera de construir la libreria de nuestros conocimientos. Por supuesto, la primera ley será el auto-aprendizaje. Nuestra herramienta para acceder a contenidos será la Red y los contenidos digitales que nos ofrece. Trabajaremos solos y en grupo… para entender la motivación y los procesos de la mente. Actualizados, de un modo espontáneo, los profesores sabremos cómo situarnos entre personas que quieren aprender con nosotros y hablar con personas que quieren aprender.
Con tanto PLE olvidó decirle usted a ZP la forma de evitar el desastre al que nos ha llevado, no contento con esto recomienda usted votar a los que dejan un país con 9 millones de personas en el umbral de la pobreza, y Montilla y compañía no llevan sus hijos a la Escuela pública ¿y usted? en fin señor Adell no ha sido muy afortunado su artículo pero la gente ya no es gilipoyas y nno se deja engañar por palabrería vana como la suya.
@Parado: vuelva a leer el artículo y no me atribuya cosas que no digo. Y es «gilipollas», no «gilipoyas».
Completamente de acuerdo. Incluso en seguir siendo ilusa, digo, ilusionada.
Gracias Jordi por esta aportación tan interesante.Siempre es un placer seguirte aunque no nos conozcamos.
Pero a pesar de los políticos, a pesar de los incuestionables datos de la encuesta, a pesar de las dificultades tanto técnicas (conectividad en los centros) como humanas (miedo a lo nuevo, apatía, acomodación… como queramos llamarlo) tenemos no ya la obligación sino la «necesidad» de usar las tecnologías no ya como una herramienta sino como un medio de cambio metodológico ya que de no ser así estaremos hipotecando el futuro de nuestros hijos.
Como siempre, muy buena entrada, Jordi.
Pues yo creo que nos estamos equivocando. Nos estamos equivocando pensando que la gran palanca del cambio, el eje sobre el que gira la innovación didáctica, aquello que va acabar con el inmovilismo metodólogico, la falta de resiliencia y de mentalidad proactiva en el profesorado, por citar algunos aspectos del problema, sean ni las TIC ni la competencia digital.
Llevo más de diez años como dinamizador TIC de mi ikastola y anteayer, cuando leí los resultados del estudio, me sentí frustrado. «Algo he/hemos estado haciendo mal durante todos estos años para que tras una década currando sin descanso sigamos usando Internet (Google) para consultar información, chachipizarras para presentar apuntes y GDocs para crear documentos de texto. ¡Es lo mismo que ya se hacía en el año 2000!», es lo primero que me vino a la cabeza después de ver los gráficos que presentó Manuel Area.
Pero después del calentón, lo pensé mejor. No, no son las TIC, no nos engañemos. Llegan continuamente maestros y maestras jóvenes a nuestros centros que les dan mil vueltas en cuanto a competencia digital y manejo de la tecnología a aquellos maestros/maestras que sustituyen. Y esa mejora en la competencia digital no esta suponiendo un cambio metodológico real a nivel de centro («perlas» que van a su bola, sin importarles un pimiento sus colegas, haberlos haylos)
Después de haber sido durante años un convencido del «efecto revolucionario» que las TICs iban a suponer dentro del sistema educativo, creo que es hora de reconocer que el camino es otro, que no son los medios, que estamos hablando de otra cosa.
Algo preocupante es que no más de 4500 docentes hayan contestado la encuesta, de un universo de más de medio millón. Este simple dato refleja que la evolución de este asunto es, a lo menos, decepcionante.
Solamente un apunte/aportación sobre a quién no votaría yo (independientemente del partido al que represente): No le daría mi confianza para gestionar la educación de mis hijos/alumnos a quien pretenda «etiquetar/valorar» el ¿»nivel»? de cada alumno, centro o comunidad autónoma basándose en una prueba de (según ellos) Conocimientos y destrezas indispensables» tan poco ajustada a las competencias reales que necesitarán en el futuro quienes se someten a ella, por no hablar de su subjetiva, de lo poco encaminada a la mejora que está y un largo etcétra que daría para otro post entero.
Debo decir que ha sido muy interesante leer ‘Escuela 2.0: ya te lo dije, Zapatero” . Veo que para bastante gente.
Como bien dices los resultados que presentó Manuel Area no son sorprendentes. Conocidos avances y viendo la presentación –en diferido en mi caso y de forma un poco penosa ya que si uno hace pausa la cosa vuelve a comenzar y no tiene posibilidad de avanzar fácilmente…- me parece que el resumen que haces responde muy bien a lo expuesto por Manuel Area.
Lo que sí me gustaría es puntualizar algunos comentarios.
Por supuesto que siempre es ‘la hora de hablar de didáctica, de enseñanza y de aprendizaje’. Pero luego nos dedicamos a hablar de hierros y cables. El mismo lenguaje que utilizamos, a puro de utilizar una especie de argot para iniciados, nos traiciona: “una minoría muy interesante de docentes están abriendo camino a la innovación didáctica con TIC”, “quizá solo somos un 5% del profesorado los que creemos que las TIC pueden ser revolucionarias en la escuela, pero estamos convencidos y decididos”, juntamente con los argumentos que denuncias.
Lo que se está comunicando es la creencia de que la integración de las TIC en el proceso Educativo, lo mejorará. Llevamos muchos años dando martillazos en el mismo clavo. Se trata de otra creencia (tú mismo hablas de ‘creemos…’), que como bien dices no llega a incidir significativamente en las prácticas.
La verdadera innovación educativa debe reflejarse en acciones que producen cambios en las prácticas, y esto forzosamente afecta a la enseñanza (no solo al aprendizaje como aparece en el discurso establecido). Para que estos cambios en las prácticas tengan lugar no es suficiente que adoptadores tempranos pongan en marcha experiencias innovadoras, realmente admirables en algunos casos. La innovación educativa, a mi entender, hace referencia a una acción colectiva que no solamente afecta a cambios en las actitudes, sino a las concepciones, a los procesos y a la práctica profesional. Y esto, lamentablemente, son procesos muy lentos. Como no puede ser de otra forma cuando se trata de cambiar mentalidades (no solamente de los profesores, claro).
Y ahí estamos. Es que todavía no hemos comenzado por este lado, al parecer….
@jsalnasi Hola Jesús,
Gracias por el comentario 🙂
Mi postura es «que las TIC pueden ser revolucionarias en la escuela»… o pueden no serlo. De acuerdo con los datos aportados por el trabajo de Manuel Area y sus colegas, el uso más habitual de las TIC en nuestro país no tiene nada de innovación o de mejora. No creo que introducir las TIC implique indefectiblemente cambios, mejoras o innovaciones. De hecho, y a tenor de los resultados de Manuel Area y de otras investigaciones similares en otros países, SE que la introducción de las TIC en sí misma, es decir, si no va acompañada de otras medidas, no provoca cambios didácticos en la mayoría de los casos. Mi queja, si se le puede llamar así, es precisamente que no estamos aprovechando las oportunidades que nos brinda un proyecto como Escuela 2.0. Y si quieres que sea más explícito, en el reparto de responsabilidades, hay una línea que las autoridades educativas no pueden cruzar. A partir de dicha línea es responsabilidad nuestra, de los docentes, introducir dichos cambios y esa es una de las cosas que no está funcionando segun los datos. También es cierto que las cosas se podrían hacer mejor «desde arriba». Por ejemplo, dedicar más recursos a la formación permanente y enfocarla más hacia la didáctica o dotar de medios solo a quien esté dispuesto a utilizarlos, etc. Que cada palo aguante su vela.
Todo proceso de cambio tiene adoptadores tempranos que, en ocasiones, crecen y se convierten en una masa crítica que generaliza la innovación, como también existe una minoría de «laggards» (de acuerdo con la terminología de Rogers) que jamás la adoptarán. A los adoptadores hay que mimarlos. En un entorno desfavorable, y creo que el actual lo es, pueden llegar a estancarse su número y no evolucionar sus prácticas y la innovación no llega a generalizarse. Un facto clave son los tiempos. Creo que mucha gente, no es mi caso, espera grandes cambios en poco tiempo y se desilusionan si no suceden. Y no lo espero porque lo que hay que cambiar para que las TIC se generalicen de la manera que nos gustaría (dentro de procesos didácticos innovadores) no son los conocimiento y habilidades tecnológicas y pedagógicas de los docentes, sino sus creencias fundamentales sobre la enseñanza y el aprendizaje. Y eso, como bien dices, es un proceso lento. Las creencias, actitudes, teorías implícitas y explícitas, valores, juicios, concepciones, axiomas, opiniones, ideología, sistemas conceptuales, procesos mentales internos, estrategias de acción, principios prácticos, perspectivas, repertorios, etc. etc. son términos que hemos usado en la literatura para referirnos a «eso» que resumimos en «creencias» y que influyen en la percepción, el juicio y, a la postre, en la acción. Encima, la relación entre creencias y conducta no es directa y lineal: todos somos más «puros» en nuestras creencias que en la acción. Y en casos de conflicto entre contexto y creencias, suele ganar el contexto por goleada.
Mi argumento es que los planes bien hechos suelen tener más probabilidades de salir bien que la improvisación o correr en zigzag como pollos sin cabeza. Y Escuela 2.0 requiere reconducción. La mayoría de los docentes entrevistados por Manuel Area y sus colegas dicen que les falta información sobre los objetivos de Escuela 2.0. ¿Será cierto que no ha habido «visión»? ¿Hay una Escuela 2.0 o una por comunidad autónoma? ¿El mensaje de la Administración ha sido claro y debatido? ¿Sabemos a dónde vamos? Yo creo que no y gran parte de culpa la tiene la Administración educativa… perdón, las Administraciones educativas, en plural. Con todo, y termino, déjame que te diga que más vale una Escuela 2.0 dubitativa que nada de nada, lo que Madrid y Valencia decidieron por motivos que todos nos imaginamos.
Finalmente, dado que los dos trabajamos en los mismo, en la formación inicial de docentes, tenemos una responsabilidad especial en este tema. La formación inicial es el sitio en el que hay que empezar a trabajar. Así lo vivo yo, al menos. Y no podemos esperar a que nuestras autoridades educativas «se aclaren».
Un abrazo.
Jordi, te admiro una vez más por tu compromiso con la educación, por tu valentía al mostrar la realidad del PANORAMA EDUCATIVO y por tu reflexión para el 20N ¡Ojalá te hagan caso, la vamos a necesitar muy mucho!. Si Zapatero se hubiera rodeado de especialistas de las aulas y buenos pedagogos como tú, otro gallo nos habría cantado.
MIEDO da lo que nos pueda llegar y que lo poco conseguido se vaya al traste.
En un futuro, si es posible como bien dices, hay que empezar por la PEDAGOGÍA, concienciar a los futuros docentes e intentar rescatar a los actuales, quizá para estos hubiera que pensar en unas MISIONES PEDAGÓGICAS que les hagan perder el miedo a las TIC y recobrar si la han perdido la ilusión de ENSEÑAR.
Un abrazo
Tenías razón cuando has recomendado leer esta entrada en clase. La verdad es que creo que si todos los profesores tuvieran la mitad de vocación que tu, la educación sería mejor, y ojalá y todos mis compañeros sigan tu ejemplo al igual que yo.
En cuanto a la escuela 2.0 creo que los profesores deberían ponerse en la situación de los alumnos y darse cuenta de que las TIC son una herramienta muy valiosa si se utiliza correctamente.
Quiero que sepas que por mí puedes estar tranquilo porque la educación es algo que me apasiona, y espero no ser nunca como esos profesores que esperan la jubilación, sino todo lo contrario, una maestra que esté por y para los niños, afrontando todo lo que se presente e innovando constantemente.
Gracias por la asignatura!
@Vanessa:
Gracias por tu comentario: es muy amable 🙂
Aunque soy uruguayo, me duele todo lo que en educación ocurre o deja de ocurrir.-Hay tanta coincidencia de problemas, motivaciones y excusas en estos resultados que presentas que parecería se hubieran vertido en nuestro país.-Con la notable diferencia que ustedes están instrumentando las dificultades y nosotros ni siquiera eso.-Estamos en la revisión de nuestro sistema educativo.-Nadie ha intentado no ya la escuela 2.0, sino la preocupación por incluir la EaD en la futura ¿reforma?.-Pero sí se pone énfasis en la instrumentación de una comisión política,de controles remotos…Pero coincido en destacar la ironía con que tratas los resultados de tu país.-No es exclusivo de España.-También nosotros adolecemos de las abulias,los olvidos, el deja para después y así nos vemos.-Hace bien leer la lucidez con que tratas el tema.-
Artículo muy interesante con el que comparto línia de opinión.
Jordi podrías explicar un poco mejor la afirmación:
«Hay demasiados intereses creados en las industrias “escolares” tradicionales, que empujan hacia el pasado, época dorada en la ganaban tanta pasta»
Gracias
Hola Enric,
Me refería especialmente a la industria del libro de texto, un mercado de aproximadamente 1.000 millones de euros anuales solo en nuestro país, que no está en absoluto interesada ni en los libros digitales (menos ingresos), ni, por supuesto, en innovaciones metodológicas que impliquen no utilizar el libros de texto como eje de la actividad didáctica… como aprendizaje por proyectos utilizando las fuentes de información, los recursos y las herramientas que nos ofrece gratuitamente la Internet. Basta leer las bobadas que dicen sobre las nuevas tecnologías los pseudo-informes que se hace hacer la ANELE, la Asociación Nacional de Editores de Libros de Texto, para sembrar dudas sobre el tema en la opinión pública.
Saludos 🙂
Hola a tod@s,
Tras leer las reflexiones de Jordi, haber asistido al III Congreso,
Doy mi humilde opinión a lo expuesto por Juanma Díaz y Jordi Adell, soy asesor TIC de un CPR con 13 años de andadura y pienso que tengo una visión interesante de éste período y voy comentando las conclusiones:
• No hay una visión homogénea del profesorado ante las TIC y la Escuela 2.0.
No todo el profesorado es apasionado de las TIC, Escuela 20 llegó en un mal momento de crisis, partiendo del proyecto de Aragón apadrinada por Eva Almunia y no se ha hecho justicia con José Antonio Blesa y sus antecesores. No nos acordamos de Aldea Digital
• Existe variabilidad y diferencias significativas entre Comunidades Autónomas y Etapas (Primaria y Secundaria).
Claro, depende del color político, se ha tirado a un lado o a otro. El éxito vendrá cuando se despolitice la Educación y se ponga en manos de sabios veteranos expertos docentes.
…..
Completo mi opinión el el blog TIC’S para la educación
Estamos hablando de ordenadores en el aula y creo que en muchos centros todavia se debate el uso de la calculadora en el aula. ¿En cuantos centros de primaria se utiliza la calculadora como una herramienta habitual en el trabajo, no solo matemático, que llevan a cabo los estudiantes?
Ahora estamos hablando de ordenadores, conexión a internet y sinceramente, creo que aún no hemos salido y ya llegamos tarde.
La tecnologia avanza muy deprisa y es necesario que haya anticipación.
Imaginad como veo yo la situación. Todos los estudiantes (y profesores) tienen un teléfono móbil, en función de la situación del centro o familiar, muchos ya disponen de un smartphone, y creo que, más pronto que tarde, todos tendran conexión a internet en su «ordenador portatil».
Creo que habria que tener una cierta visión de futuro y empezar a hablar sobre como podemos implementar el teléfono móbil en el aula antes de que el tren (ahora que estan de moda los corredores) pase por otro corredor.
Y otra reflexión, ¿En cuantos centros educativos está prohibido el uso del móbil?
Me ha gustado mucho tu artículo, certero, preciso y coherente. El problema es que se dejan las cosas (formación, innovación, implantación de metodologías del siglo XXI, etc.) a libre albedrío. No hay buenos planes de implantación y formación, y se recurre a escurrir el bulto (en el 95 % restante). Falta ilusión, y lo más grave, se ven a jóvenes que entran en la profesión sin dicha cualidad. Ilusión significa pensar en lo nuevo que podrías hacer este año, organizarlo, compartirlo con la familia, con los que quieran (que no aparecen) y seguir andando. Pensar que no estoy sola, que hay gente como tu, como Olga, Salomé, Pilar, Lourdes, etc., que aunque están lejos, también siguen. Y lo mejor es que tu ilusión enriquece mi ilusión y cada vez hacemos más cosas ilusorias sin mirar el reloj o la puerta a la que llamar.
Nuestro sistema de valores es distinto. Todo lo que soy se lo debo a la Pública, la salud de mi madre se prolongó por la Sanidad Pública (los mejores médicos del Dr. Marañón), etc. Hoy hay mucha desgana en lo público y es una pena. Otro problema es el espìritu picaresco propio de nuestro país. Adelante, sigue así.
Aquí la empresa que trabajaba a la Consejería ha quebrado por las deudas ocasionadas por los servicios públicos (200.000 € sólo de la Consejería) y no nos pueden reparar los aparatos de redes. Esto me pone pesimista. Las comunidades autónomas se hunden y siguen subvencionando-pagando la escuela privada. Y TAITANTAS irresponsabilidades más. Ya veremos dijo… Saludos
Rosario
Soy un profe de secundaria de FQ, que ya era un veterano en los albores de los Proyectos Atenea y Mercurio. Claro, ya jubilado. Totalmente de acuerdo en que sin cambio en la metodología no hay nada que hacer. Las TIC son un medio, no un fin. Me ha gustado mucho eso de los fabricantes: «con ésto no tendrás que cambiar en nada». Durante la implantación de la LOGSE estuve algo implicado en la formación permanente del profesorado y pude darme cuenta que no es suficiente. ¿Se puede hacer algo por la formación inicial del profesorado de secundaria?. Me refiero a metodología, didáctica y organización, con las TIC formando parte del arsenal, como corresponde a los tiempos, no como el bálsamo de Fierabrás o la purga de Benito.
Totalmente de acuerdo con todo lo que postulas en el artículo, no obstante, he de decir, que somos los maestros, profesores y futuros maestros, los que podemos presionar a las editoriales, en este caso sobre el paso a digital de los libros de texto, y me explico, si los padres de un niño de primaria tienen que comprar cada año una media de 8 libros a 30€ cada uno son 240€, si le decimos a los padres que esos 240€ se inviertan en un «aparatito» que le va a acompañar durante buena parte de la educación básica de los hijos y que es una inversión a medio plazo, los padres estarían de acuerdo,porque invertirían un 600% menos en libros de texto, dinero que podría beneficiar a los alumnos en distintas actividades transversales (por poner un ejemplo) por tanto otro punto de presión.
El problema vendría luego a la hora de impartir clases, es decir, de tener equipamiento adecuado, hablo de la Pizarra Digital Interactiva, por poner otro ejemplo, el sueño de todo maestro pro-herramientas digitales y que lamentablemente se está tardando tanto en implantar en las escuelas públicas de nuestra comunidad en concreto.
Ojalá y los que tienen responsabilidades en cuanto a materia educativa y presupuestaria se refiere, se dieran cuenta que invertir en educación es invertir en futuro, y las nuevas tecnologías son el futuro, quiero decir, el presente.
Hola Anna,
Desgraciadamente los libros de texto digitales no son mejores que los de papel y las pizarras digitales se usan igual que las de tiza de toda la vida. Son dos ejemplos de cómo la tecnología más potente que hemos conocido hasta la fecha para transformar la educación no sirve para cambiar nada si los profesores no quieren hacerlo. Así nos va.
Buenas noches, se me había pasado este artículo (no sé porqué pero se me había pasado) y ahora, más cerca de la 1 de la mañana que de la media noche tengo que responder o no duermo bien hoy. Cagüenla…!!!
Por partes, que diría Jack el destripador.
El «ya te lo dije» me duele, me duele mucho porque aparte de ser verdad es que acaban de tirar un porrón de dinero que en los tiempos que corren es casi criminal. NO se pue meter cacharros en las aulas y que la cosa cambie por osmosis… Y eso nos pasa porque de la mano del político de turno se le unen técnicos de primer nivel que o no saben o tienen intereses creados (o eso o el hecho de haber hablado con editoriales, empresa tecnológicas y diversas «multinacionales» es normal… Y yo co que no lo es). ¿Y cuantos millones de euros van?y lo peor es leer los programas electorales de los que concurren a la presidencia… Triste, realmente triste porque no tienen ni p**a idea… Me pregunto: ¿Quienes son lo responsables de la temática educativa de esos panfletos políticos?
Pero seguimos gastando, porque viendo como son esos resultados, aquí en Galicia siguen metiendo pasta en esa misma linea sin ton ni son, hablando de plataformas 2.0, ultraportátiles, PDIs com si algo fuese a cambiar. Bueno, en Alicia tiene un pase… Le han puesto de nombre al proyecto «Abalar» que viene decir algo así como mover las cos para que queden como están. El nombre clavado!!
Por otro lado, no me extraña los resultados del estudio de profesores que, quitando posiblemente al profesorado de infantil y a alguna de las áreas que históricamente no han usado libro de texto, el resto es de lo más conformista y conservador que se puede echar a la cara. Con ese percal, el resultado no podría ser otro. Que quiere el profesorado? Libro de texto, tiza y cacharreo, no formación para modificar tu forma de pensar, trabajar, comunicarte con el alumnado y él contigo, no no… Formación en cacharreo. Es decir «como tengo que hacer para que el cacharreo se adapte a lo que ya hago y no adaptarme yo a las posibilidades tecnológicas SIEMPRE bajo un nuevo, y más necesario que nunca, prisma pedagógico del aprendizaje. Me considero dentro de ese cinco por ciento, a lo mejor no lo estoy, de la misma manera que la gente que sigue dando clase como siempre considera que el que está equivocado soy yo. No sé muy bien porqué desde un tiempo me llaman para dar conferencias, talleres, etc y hasta salgo en los medios; y sin embargo en mi cole NO SE HA MOVIDO UNA BRIZNA DE AIRE, no hay diferencia, ninguna. Las personas que ya hacían cosas interesantes antes, las siguen hacndo ahora y me preguntan dudas tecnológicas, pero metodológicamente no es necesario porque ya trabajaban por proyectos, ya trabajaban con múltiples lenguajes, etc y las que no hacían nada de eso, pues igual… no hacen nada de eso ni lo harán! Es el profesorado que tenemos y no hay más!!
Ya hemos hablado más de una vez sobre este tema, pero como no empiece a modificarse todo el sistema educativo: formación inicial y permanente, acceso del profesorado, sistemas de trabajo en los centros, presupuestos y autonomía curricular, no seremos capaces de salir de este círculo vicioso.
Para terminar, unas palabras sobre el estudio. Le eché un vistazo hace casi un mes, estando en Segovia, y la verdad, no sé el coste que tiene un estudio así, pero personalmente me pareció como poco y siendo educado (y me estoy aguantando) «flojo, muy muy flojo»
Tengo la ingrata sensación de que no se cuestiona ni la escuela 2.0 en ese informe ni las tecnologías incluidas ni muchas de las cuesiotnes asociadas al programa escuela 2.0 y creo que SI es muy necesario hacer un estudiso erio en ese sentido y decir cuatro cosas a las mentes lúcidas que han gastado tantos millones en ese programa. Tampoco se cuestiona si el profesorado está apoltronado ni si debería haber otro tipo de motivaciones exógenas o endógenas en el sistema que permita que ese cinco por cierto no acabe quemado y triturado en el día a día.
Cada día tengo más claro que llevamos tanto siglos aprendiendo en papel que nos cuesta un mundo hacer otro tipo de aprendizaje que no se base en lo escrito, en lo textual… Y no lo entiendo, porque para mi si está claro desde hace mucho tiempo, y no soy ningún cerebrito.
Bueno, las 01:40, otro día escribo más… o no! 🙂
No voy a comentar el artículo en sí, pues comparto las ideas generales. En este asunto de la educación y las TIC hay demasiado «cacharreo» oficial, pero poco estudio sobre la formación y las metodologías más adecuadas. Y así nos va, claro, gastando en maquinitas el dinero que no tenemos.
Pero lo que me sorprendió fue el último párrafo. Ahora que ya pasaron las elecciones y todo se resolvió, electoralmente hablando, noté un cierto aire sermonil. No sé si huele a sermón de la montaña o tiene el aroma de un sermón parroquial; no soy un experto en ellos. Pero lo que pienso es que, para la gran mayoría, corren malos tiempos para los sermones. Lo siento…
Saludos
@mario aller: Es cierto. Corren malos tiempos para los sermones. Ahora, después de las elecciones, peores que antes, cuando escribí eso que comentas. Pero no te preocupes: tenemos cuatro años para darnos cuenta de lo que hemos hecho como país votando al PP. En Cataluña, que van unos meses por delante, ya lo están comprendiendo.